Las carpetas de presentación son una gran elección como herramienta publicitaria y un soporte muy útil para guardar documentos, folletos, tarjetas de visita y mucho más. Las carpetas personalizadas serigrafiadas con el logotipo de tu academia, librería o empresa son un reclamo promocional económico y funcional. Se utilizan sobre todo en ferias y conferencias, para llevar siempre consigo todo lo que se necesita para trabajar o asistir a las ponencias. En el mundo de la empresa, sobre todo en contextos comerciales, las carpetas se utilizan también para presentar productos o líneas de productos y para regalar en eventos y congresos. Además son una buena alternativa para promocionar y fidelizar a tus clientes.
Crear tus carpetas personalizadas online es muy fácil, hay muchas web que te permiten diseñar tu arte directamente en línea o si ya tienes un archivo creado por tu diseñador, puedes elegir el producto que prefieres y subir tu archivo para la impresión carpetas. Hay una gran variedad de modelos que se pueden elegir, carpetas trípticas, dípticas, para hojas de tamaño a4 o a5 y con muchos acabados diferentes. Por ejemplo, las carpetas se pueden imprimir solo en un lado, o sea solo las dos caras exteriores, o en el interior también. Normalmente las carpetas de presentación son de cartón de 350 gramos estucado mate o brillo; pero se pueden pedir también con acabado plastificado, eligiendo siempre entre plastificación mate o brillante, que refleja la luz y tiene más brillo. La ventaja de comprar carpetas a través de la web es, por supuesto, el precio; en efecto las tipografías online ofrecen siempre ofertas muy convenientes.
Si estás buscando una solución aun más barata para personalizar las carpetas de presentación, una solución interesante puede ser la impresión de vinilos. Los vinilos son como etiquetas pero suelen ser más grandes (a partir de 15×15 centímetros) y más resistentes. En efecto los materiales con los que se realizan, habitualmente el vinilo monomérico o polimérico, son muy duraderos y casi indestructibles contra rasguños y cualquier tipo de deterioro. Estos vinilos nos permiten realizar adhesivos que nos pueden ser útiles a la hora de personalizar una carpeta: por ejemplo, se podría optar por imprimir carpetas neutras, es decir de uno o más colores sin escritas particulares y luego aplicarle el vinilo personalizado por cada producto, marca o para cualquier otra cosa que queremos promocionar. En estos casos es posible crear una carpeta genérica, es decir única para toda la línea de productos o marca, y luego personalizarla por cada elemento que queremos promocionar.
Otro aspecto interesante de los vinilos es que pueden tener corte contorneado, es decir siluetado según la forma de nuestro logo o imagen. Para realizar productos con corte personalizado solo hay que crear dos archivos que tengan las misma dimensiones: el primero incluirá el diseño a imprimir, mientras el segundo solo el trazado vectorial de la silueta que se quiere recortar.