La red Internet está rápidamente rebasando los métodos offline, sobretodo con respecto a los medios de comunicación y a los materiales en papel impreso. En efecto, la competencia entre medios electrónicos y tradicionales es muy fuerte, pero aunque parezca que el print marketing está cada vez más obsoleto, su influencia todavía domina la industria publicitaria.
Las redes sociales y el email marketing han en cierto modo reducido el uso de métodos de comunicación offline. Las personas solían comunicar a través de cartas y telegramas, pero hoy la información se intercambia virtualmente. Internet, televisión y radio han llegado a ser las principales fuentes de entretenimiento e información. Los periódicos y las revistas, que solían ser un elemento vital del día a día, empiezan a convertirse a la distribución digital. Muchas personas hoy prefieren leer ebooks en lugar de los tradicionales libros en papel, por su comodidad y por los precios ventajosos. Muchas publicaciones que han sido editadas con éxito por muchos años, ahora se afanan en mantener su posición offline y en encontrar un hueco en el mundo de la comunicación de masas virtual.
Aunque los medios offline van cayendo en desuso en la actualidad, no se debería subvalorar su importancia. Los productos impresos siguen siendo una parte indispensable de cualquier estrategia promocional y comercial. Ya sean tarjetas de visita, catálogos o folletos informativos publicitarios (de empresas, organizaciones, eventos etc.), el impacto del print marketing es significativo. Ante todo para quien no puede soportar los costes de la publicidad digital, y luego para quien no encuentra sus clientes-target dentro del público online y no beneficiaría de este tipo de inversión, sobre todo porque a menudo los métodos de publicidad online se dirigen a quien ya ha buscado un determinado producto o servicio y difícilmente alcanza un cliente potencial que en aquel momento no está pensando en lo que ofrecemos. En estos y muchos otros casos los métodos más tradicionales representan el mejor sistema de publicidad empresarial. Basta pensar en el gran empleo de flyers y carteles en los sectores más variados: estos recursos ofrecen una fuente de promoción más habitual, eficaz y, a la vez, más duradera, en particular en aquellos contextos en los que la influencia de medios digitales es todavía mínima o poco incisiva. En efecto, la publicidad online puede ser limitativa para quien no utiliza mucho Internet, mientras sirviéndose de contenido atractivo y de una distribución bien planeada, todos pueden captar la atención del público con métodos tradicionales, incrementando ganancias y popularidad y minimizando los costes.
El print marketing goza de una capacidad comunicativa diferente con respecto a la publicidad en la web; piénsense por ejemplo a la visibilidad que proporcionan los carteles de grandes dimensiones al lado de la calle que, aún siendo un método clásico y no innovador, si bien diseñado, capta mucho más la atención con respecto a los banners de las páginas web. El ojo de un usuario está continuamente expuesto a estos tipos de input (que en la mayoría de los casos lo molestan) y por consiguiente se ha acostumbrado a no prestarle atención. Por eso, el mismo mensaje difundido por medio de soportes offline suele ser más eficaz, piénsense por ejemplo a las exitosas campañas offline de la más famosa compañía de café
del mundo:
Sin embargo, utilizar ambos medios conjuntamente es la solución mejor, en vez de elegir una u otra estrategia. La promoción a través de las redes es muy útil porque además de la posibilidad de monitorizar los resultados de nuestra inversión, logra llegar a una audiencia más amplia, pero sin un soporte offline y tangible quedaría incompleta.