El nuevo año todavía no ha empezado, pero ya conocemos cual será el color que lo teñirá. Su nombre es Greenery, otro neologismo que tendremos que conocer para estar siempre a la última moda. Como siempre, ha sido anunciado por Pantone, la autoridad reconocida a nivel mundial en el ámbito del color.
Para empezar, la novedad es que se vuelve al monopolio de un color único. Contrariamente a lo ocurrido en 2016, cuando fueron dos los colores elegidos como líderes del sector de la moda, del diseño y de la decoración: el rosa cuarzo y el azul serenity, dos tonalidades pastel. Mientras para 2017 se ha anunciado un solo color: el Greenery, un tono brillante que mezcla matices amarillas y verdes, para revitalizar nuestros días primaverales y veraniegos e incluso para teñir los grises días de invierno.
Sin embrago, este color supone una ruptura significativa, con respecto a la reconfortante suavidad de los colores del año 2016. El Greenery (código 15-0343 TCX) presenta un carácter mucho más fuerte y al mismo tiempo inusual, en el sentido de inesperado. Lo que quiere expresar es un deseo de rejuvenecer y renovarse, tras un periodo globalmente tumultuoso, bajo varios aspectos. Por lo menos eso es lo que anhelan los de Pantone. Al mimso tiempo, el greenery (literalmente, follaje o verdor) es un color que comunica tranquilidad y que simboliza una reconexión con la naturaleza. Además, este verde amarillento da un toque de vitalidad y positivo que puede revitalizar cualquier contexto en la que se utiliza, ya sean prendas o hogares.
No es de sorprender que Pantone también tenga mucho en cuenta lo que se ve en las pasarelas y los dictamen del mundo de la decoración; es decir, no solo las decisiones de la institución de coloración influyen en la moda de estos sectores, sino es una relación recíproca. En efecto, se ha visto desfilar este coloren en algunas de las pasarelas de las firmas más importantes (como Gucci y Balenciaga, por ejemplo), aparecer en la gran pantalla del cine (el amuleto del Doctor Strange – Benedict Cumberbatch) e incluso en el mundo del make up. La cultura pop entonces influye en las decisiones de Pantone, que desde el año 2000 elige un (o dos, como hemos visto) color del año, basándose en una serie de factores que tiene que ver con las modas del momento. El mensaje es que el color elegido refleja el tiempo en que vive.
En este contexto el Greenery lleva consigo un mensaje de esperanza y deseo de renovación que refleja el cambio primaveral que interesa la naturaleza. Como explica la directora ejecutiva de Pantone, Leatrice Eiseman: “Cuanto más sumergida está la gente en la vida moderna, mayor es su deseo innato de hundirse en la belleza física inherente al mundo natural. Este cambio se ve reflejado en la proliferación de todas las cosas que expresan el color en la vida diaria, como la planificación urbana, la arquitectura, el estilo de vida y las elecciones de diseño a nivel global”.